miércoles, 25 de julio de 2012

Para ti, aita


Hola aita:

Ya sé que han pasado muchas semanas desde la última vez que te escribí, pero estos meses han sido un tanto movidos. Fíjate que ahora mismo estoy escribiendo esto desde el Centro San Viator, muy cerca de Lima. Sí, Lima, Perú.

Ya ves, todo ha cambiado desde que te fuiste, tanto que la “gallina” de tu hija por fin se ha atrevido a salir del nido. Hay acontecimientos en la vida que hacen madurar de golpe, y desde luego, aquel jueves fue uno de ellos.

Antes de contarte qué hago aquí, quiero felicitarte, ya que cumplirías 63 años. Ya es el segundo que lo celebramos sin ti y es un poco raro, pero nos tenemos que acostumbrar, que remedio.

Pues eso, que llevo ya tres semanas en Perú. Estoy como voluntaria con un grupo de educadores y comunicadores que trabaja en un barrio de un distrito de Lima. Los profesionales del centro se dedican a tratar de mejorar un poco la vida de los niños, jóvenes y madres del entorno, y la verdad que tiene un mérito terrible, lo que viven en su día a día los usuarios del centro es muy duro.
¿Sabes para qué me está sirviendo esto? Para darme cuenta lo afortunada que he sido, y soy, de tener una familia como vosotros, y que a pesar de todo lo que nos ha tocado vivir, el amor y cariño que he recibido de ama y de ti no tiene precio.

Ya me voy a ir despidiendo. Pero antes quiero decirte que me hubieras venido muy bien para ayudarme a convencer a ama de que la idea de irme tres meses a 1000 km no era tan descabellada. Seguro que te imaginas cómo lo ha pasado desde que le dije cual era el plan de este verano. Tú le hubieras dicho: “Deja a la niña que haga lo que quiera”. Hubiese sido más fácil.

Te echo de menos, aitatxu.

Te quiere, tu perla del Cantábrico.

Aitziber.

1 comentario:

  1. Y lo afortunados que somos nosotros de conocerte!!!

    Yo estoy segura que de alguna manera, nunca se fueron del todo. Yo hay días que creo que puedo sentir a Nerea, mi mejor amiga, conmigo. E incluso siento que me manda señales. Seguro que a ti también te pasa.

    Y esté donde esté, mirará hacia la tierra y sacará pecho de la persona que ha modelado. Que no te quepa duda.

    Te echamos de menos. Un beso gigante

    Maripres

    ResponderEliminar